martes, 27 de noviembre de 2007

RECUERDOS PROMOCIÓN 2007 COLEGIO PARROQUIAL SAN JOSÉ DE FONTIBÓN, BOGOTÁ, COLOMBIA.

Son muchos los recuerdos que tengo de la promoción 2007. Desde que ingresé a la Institución en 2005, se me vienen cientos de recuerdos en la cabeza, como los partidos de microfútbol, o los de fútbol en el pastal; aunque muchos no fueran buenos con el balón, siempre había forma de que todos nos uniéramos en torno al deporte.

Siempre había un equipo de los buenos, y de los otros que no lo eran tanto, pero supimos unirnos en pro a ver bien a la gente, a animarse, a luchar en torno a ser una promoción en grande.

Y como no sentirse bien, si es que siempre hubo gente que ayudó a los que más necesitamos, que siempre buscamos una mano amiga. Por supuesto que siempre había quien sacara sus chistes y animara al resto, así el cuento fuera malo lo aplaudían en torno a darle moral.

Como no recordar a la monja, que siempre nos incentivó a portarnos bien aunque sucediera lo contrario, o alguna vez que tuvimos clase de música, era la mejor recocha que había, pues se le ponía atención a lo que sea, menos a lo realmente importante.

En efecto, no estuve muchos años en la institución, pero que bien me sentí, nunca fuimos menos en muchos aspectos, y la alegría siempre fue contagiosa. Sin duda que el colegio es de las mejores experiencias de la vida, y hay que saberla aprovechar.

El ambiente era perfecto para hacer los primeros pinitos en el amor, y siempre había quien nos tuviera flechados. Los grandes recuerdos permanecen, y algunas personas que aunque no pudieron graduarse con nosotros, siempre están presente.

Cada uno era un mundo a parte, pero todos se complementaban de gran manera, y se apoyaban entre si. Gracias a todos y cada uno, porque me dejaron algo por aprender, y de mi parte espero haberles enseñado cosas. Que cada uno en su diferente proyecto se sienta realizado, y pueda lograr sus sueños con holgura y con miles de bendiciones en el camino de la vida.

Gracias a todos y cada uno, por permitirme compartir un pedazo de sus vidas, ojalá que sus propósitos se cumplan a cabalidad, y a pesar de los 10 años de graduados, todavía los recuerdo con gran cariño. Dios los bendiga. 



domingo, 4 de noviembre de 2007

SACRAMENTO DE LA CONFIRMACIÓN

Aquel Domingo 4 de Noviembre de 2007, en la Parroquia San José de Fontibón en Bogotá, Colombia, el lugar donde le di mi aceptación al Señor en el Sagrado Sacramento de la Confirmación.

Es un momento especial en la vida de cada uno, porque es un paso importante para el matrimonio, es un lugar donde el señor Dios quiere que lo recibamos, con carisma, con deseos de espiritualidad, de ser mejores diariamente.

Es una fecha que Dios nos regala momentos especiales, momentos únicos en nuestras vidas, la sagrada confirmación es reafirmar los momentos de Fe, de consideración con el hermano necesitado, con el ser que Dios quiere que seamos.

Hacer la Confirmación requiere vocación de Fe, afirmación de creer que es posible lo imposible, que Dios nos da nuevas oportunidades de creer en sus promesas.